Ayurveda y Yoga: ciencias hermanas 2
En nuestro artículo anterior nos referíamos a la íntima relación de estas dos ciencias, veamos ahora como ellas operan en la dinámica de relación de las fuerzas doshicas.
VATA
Las personas con un desequilibrio de vata dosha tienden a experimentar una mayor ligereza, frialdad y mayor movilidad. Pueden sufrir de pérdida de peso, debilidad inmunológica, estreñimiento, manos y pies fríos, ansiedad o nerviosismo. Para estas personas, las posturas de Yoga calmantes y que permiten conectarnos con la tierra son las mejores. Las posturas de pie tales como la postura del árbol (vrksasana) y de la montaña (tadasana) nos permiten conectarnos con la tierra y ayudan a reducir la ansiedad y el nerviosismo. Las posturas que comprimen la pelvis como por ejemplo la inclinación sentada hacia adelante (pascimottanasana) ayuda en la reducción del estreñimiento mientras que las posturas de fuerza como el cuervo (bakasana) ayudan a la circulación. Las posturas rápidas como el saludo al sol repetitivo (surya namaskar), pueden aumentar el nerviosismo con el tiempo y las posturas que sean realizadas sin tener en cuenta los detalles pueden maltratar las articulaciones. Las posturas correctas ayudan a traer el equilibrio, y las posturas no apropiadas pueden generar un gran desequilibrio.
Las personas de naturaleza vata deben evitar ciertas asanas. Ellas particularmente deberán evitar aquellas que sobre-estimulen el sistema nervioso tales como saludos repetitivos al sol (Surya Namaskar) y aquellas que ejerzan presión excesiva en las articulaciones mas sensibles. La unión cervico-toráxica es una de estas áreas. Esta es la región ósea donde el cuello se encuentra con los hombros. Aquí, las vertebras grandes sobresalen como “pulgar adolorido”. Las personas de naturaleza vata y desequilibrio tienden a tener huesos más débiles, con menos relleno graso, ligamentos más flexible y son mas susceptibles al dolor. Por estas razones Salamba Sarvangasana (postura de hombros) y Halasana (arado) deben evitarse o modificarse mediante la colocación de una manta bajo los hombros para un acolchado extra. Esto también disminuye la flexión extrema en la que el cuello esta colocado. Aun así, las personas no deben sostener estas poses por largo tiempo o correrán el riesgo de lesionarse.
PITTA
Las personas con un desequilibrio en pitta dosha tienden a sufrir de calor excesivo en el cuerpo. Se sienten calientes y puede tener una multitud de problemas en la piel como acné o psoriasis. También pueden sufrir de diarrea, ardor en los ojos y debilidad del hígado. Las posturas calmantes y frías que comprimen el plexo solar les traerán balance, mientras que aquellas que extienden el plexo solar ayudan a disipar el calor corporal. Las posturas como la cobra (bhujangasana) y el arco (dhanurasana) son ejemplos de posturas que disipan el calor excesivo. Las personas de desequilibrio pitta necesitan evitar el sobrecalentarse con su práctica de Yoga. Las formas aeróbicas de Yoga que causan sudoración profusa y las posturas invertidas (las cuales aumentan el calor en la cabeza) deben evitarse.
Las asanas Yoga, que deben ser evitadas por la gente con desequilibrio o constitución Pitta son pararse de cabeza. Al pararse de cabeza están calentando el cuerpo y gran parte de este calor se acumula en la cabeza y los ojos. Los ojos son órganos controlados principalmente por pitta, ya que están involucrados en el metabolismo de las impresiones de luz y las percepciones visuales. Por esta razón, pararse de cabeza puede contribuir al inicio de enfermedades de los ojos o a empeorarlas. Las personas con diabetes deben evitar todas las inversiones ya que puede complicar su condición causando endurecimiento de los pequeños vasos sanguíneos en los ojos. Esto los hace más susceptibles a daños causados por el aumento de presión arterial en la cabeza. Las personas con glaucoma deben evitar las inversiones, debido al aumento de presión intraocular. Si una persona de constitución pitta elige pararse de cabeza, tal vez porque no tiene grave desequilibrio, entonces pararse de cabeza debe mantenerse por un periodo muy corto de tiempo.
KAPHA
Las personas con un desequilibrio de kapha tienden a experimentar pesadez, lentitud, frío y humedad en su cuerpo. Sufren de congestión, aumento de peso y letargo. Las prácticas estimulantes y calientes de Yoga son beneficiosas. Se recomiendan las formas aeróbicas a pesar de que debe comenzar lentamente y progresar también con lentitud. El saludo al sol, como su nombre indica, es bastante caliente y al realizarse repetidamente, es quizá la mejor secuencia de Yoga para el desequilibrio de kapha. Su naturaleza aeróbica alivia el letargo y ayuda a perder peso. Las posturas que extienden o abren el pecho reducen la congestión y ayudan a la respiración. Estos incluyen la postura del arco elevado (urdhva dhanura) y la postura del puente (setu bandha sarvangasana). Mientras que se pueden practicar posturas meditativas, estas deben ser equilibradas con posturas activas para evitar un incremento del letargo.
Pocas asanas son dañinas para kapha, su naturaleza le permite beneficiarse de todas formas de estiramiento y movimiento. Sin embargo, dos áreas débiles del cuerpo de los individuos kapha son los pulmones y riñones. Las asanas, que ejercen presión excesiva en la parte baja del abdomen, si se mantienen por mucho tiempo, pueden agravar los riñones. Asanas como Dhanurasana (pose de arco) es una de ellas.
Tener conciencia de la respiración mientras se practica Yoga es muy importante ya que ayuda a tomar conciencia del cuerpo. Si una pose esta generando dolor o se extiende a menudo demasiado lejos, el cuerpo va a reaccionar con una alteración en la respiración antes que se ocasione una lesión. Esta alteración puede ser acortamiento de la respiración o mayor ritmo en la respiración. De esta manera, la conciencia de la respiración nos conduce a la conciencia del cuerpo. Practicar con conciencia incrementa la naturaleza sattvica de la propia práctica de Yoga y como tal mejora el propio desarrollo espiritual. Todas las personas, deben realizar asanas con lentitud y calma pero con respiraciones completas. Este tipo de respiración tranquiliza vata y pitta. Las personas de naturaleza kapha deberían respirar del mismo modo cuando realizan asanas de estiramiento suave pero deben balancear los efectos calmantes y sedantes de estas asanas y el patrón de acompañamiento de respiración lenta con la activación y fortalecimiento de asanas que permitan una respiración más rápida y corta. Esta forma de respiración calienta y estimula el cuerpo y la mente y por lo tanto brindan mayor equilibrio a kapha.